(EFE). El Aita Mari ha desembarcado esta madrugada en el puerto italiano de Civitavecchia, cerca de Roma, a las 31 personas, entre ellas diez niños, que rescató de un bote de madera el pasado miércoles tras lo cual tiene previsto volver a salir al mar en una nueva misión este fin de semana.
Según han informado a EFE fuentes de Salvamento Marítimo Humanitario, el buque ha atracado sobre la 1.40 horas de esta madrugada en el puerto italiano tras dos días de navegación desde el punto en el que se produjo el rescate.
El desembarco de los migrantes, todos ellos en buen estado, ha concluido sobre las 4.30 horas, han precisado las fuentes.
Durante la mañana el personal del buque llevará a cabo las labores de desinfección tal y como exigen las autoridades italianas para obtener el certificado sanitario.
El siguiente paso será «volver a pedir despacho porque, por primera vez, el Aita Mari tiene previsto llevar a cabo un misión consecutiva este mismo fin de semana», han informado las fuentes, que han criticado que las autoridades italianas ponen «trabas» a su labor y les asignan puertos lejanos a los lugares donde se producen los rescates.
Los migrantes, la mayoría procedentes de Costa de Marfil, Senegal y Guinea Conakry, desembarcados este sábado en Civitavecchia, fueron rescatados de un pequeño bote sobrecargado en aguas del Mediterráneo central.
El Aita Mari partió el 10 de febrero desde Vinaròs (Castellón) tras meses en puerto y una vez obtuvo a primeros de mes la autorización del Gobierno de España para llevar a cabo su novena operación de rescate.
Desde que este antiguo barco pesquero fue transformado en buque de rescate en 2019 ha rescatado a más de 1.000 inmigrantes en aguas del Mediterráneo.
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