«Estos trabajos no responden a las necesidades reales de las ciudadanas», dice el colectivo Ehun tras haber precintado, esta mañana, las bocas de las obras del Metro de Donostia. «Además, como hemos visto, la inestabilidad del terreno ha aumentado la preocupación de las donostiarras», añade el movimiento en un comunicado.
«Los agujeros del metro son los indicadores más oscuros de la red clientelar-mafiosa que viene del franquismo. El objetivo de esta red es hacer llegar los recursos públicos a manos privadas. Por ello utilizan obras públicas que no responden a necesidades reales. No queremos vivir en un Estado que antepone el bolsillo de unos pocos por encima de la vida de todas», afirma Ehun.
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