Eguzki denuncia que ADIF «ha vuelto a incumplir sus compromisos con la remodelación de la estación del centro de Tolosa«. «No solo no se han licitado y adjudicado las obras en 2023, como se había anunciado, sino que el proyecto sigue sin estar definitivamente aprobado, de modo que tampoco ha podido suscribirse el convenio previsto con el Ayuntamiento».
El grupo ecologista recuerda que el Ararteko, en un informe de 2011, calificó esta estación directamente como “inaccesible”, y tres años después, en un plan de 2014, ADIF asumía que debía abordar el problema.
En 2017 ADIF anunció que había licitado el proyecto, que contaba con un plazo de redacción de 5 meses. En 2019, ante nuevas protestas por el retraso, la entidad afirmó que el proyecto estaba ya redactado y “en fase de supervisión”. Fue presentado en 2021.
En marzo de 2023 representantes de ADIF mantuvieron una reunión con el gobierno municipal. «Reconocieron el retraso, que achacaron a problemas internos, y se comprometieron a destinar más recursos humanos al proyecto para que éste se aprobara antes del verano y se pudiera iniciar la licitación y adjudicación de las obras antes de que finalizara el año”. Eguzki critica que a día de hoy la situación en la estación de Tolosa es la misma de siempre.
«Lo que está sucediendo con esta estación de Tolosa es escandaloso, sin duda, pero no es más que un botón de muestra del abandono al que la administración somete a las líneas de cercanías, en el caso que nos ocupa, la Irun-Brinkola», advierte Eguzki, que espera que si las líneas de cercanías son transferidas a Euskadi, como se está diciendo, «ha de ser ante todo un medio para mejorar el servicio. Y eso pasa por dedicar recursos, dado que durante años se ha invertido en las líneas de cercanías muy por debajo de lo exigible».
El grupo ecologista recuerda que la estación de Tolosa es la sexta de Gipuzkoa en número de usuarios, más de un millar al día. En total son 30 estaciones en el Territorio.
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