«En 2016 se barajaba la cifra de 50 millones de toneladas de residuos en el Golfo de Bizkaia. La persistencia del plástico es tremenda y continúan los vertidos», denuncia el colectivo ecologista Eguzki, que insta a poner coto a la producción indiscriminada de plástico y hace un llamamiento a las instituciones locales. Eguzki hace estas reflexiones tras el vertido de pellets de plástico del barco Toconao en la costa de Portugal.
El grupo ecologista advierte sobre la necesidad de frenar la producción de este producto, sobre todo de usar y tirar, «algo en lo que la UE ha avanzado, pero de forma muy, muy insuficiente». También insta a la ciudadanía a depositar correctamente este material para su reciclaje y recuerda a las instituciones locales que tienen una responsabilidad en esta materia.
Ante lo que considera «un mar de plástico» Eguzki propone campañas de vigilancia, control y medidas efectivas para la reducción de la producción y el consumo, así como otras medidas preventivas como colocar rejillas en la parte baja de las barandillas que colindan con los cauces fluviales, método que desde Eguzki vienen impulsando en los últimos años.
También anima a las corporaciones locales a dedicar recursos a limpiar periódicamente el río, «del mismo modo que los dedican a limpiar la plaza o las calles del pueblo».
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