La Ertzaintza ha neutralizado un grupo criminal dedicado a la comisión sistemática de robos con fuerza en empresas de Gipuzkoa, principalmente, y que se ha saldado con seis arrestos y la identificación del séptimo integrante, todos ellos varones del Este del Europa. Habrían actuado en localidades guipuzcoanas como Idiazabal, Zaldibia, Oiartzun, Errenteria, Elgoibar, Asteasu, Ibarra, Tolosa o Zestoa, entre otras, pero también en lugares limítrofes como Zamudio y Mallabia, en Bizkaia, o Agurain, en Araba.
La Policía Autonómica les atribuye 31 robos de este tipo. Accedían a los edificios tras la realización de butrones en la mayor parte de los casos, para seguidamente atacar las cajas fuertes existentes en su interior, previa inutilización de los sistemas de alarma. Cuando su detención, realizada en la madrugada del pasado viernes en Andoain (tras un nuevo asalto en Agurain), residían en Donostia, principalmente en el barrio de Amara, donde se habían trasladado desde Alicante. También han sido interceptados tres vehículos en los que operaban, y se registraron dos viviendas donostiarras.
Los seis detenidos tienen entre 36 y 52 años de edad. Cuatro de ellos son serbios, uno albanés y el último esloveno. La Ertzaintza está tratando de localizar al séptimo para detenerle. Cuatro de los arrestados cuentan con numerosos antecedentes por delitos contra la propiedad.
La titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Eibar, desde donde se coordinó esta llamada operación ‘Lazar’, decretó la puesta en libertad provisional de todos ellos, previa retirada de sus pasaportes y con la obligación de personarse quincenalmente en sede judicial, ya que la Fiscalía no había solicitado la prisión provisional de ninguno de los detenidos.
Según la nota difundida por el Departamento Vasco de Interior, dos de los miembros del grupo estaban siendo investigados a su vez por la Policía Judicial de la Guardia Civil de Alicante y Murcia, por hechos similares cometidos en diferentes lugares de la costa mediterránea.
‘Zulos’ en Andoain
Las vigilancias y seguimientos realizados por la Ertzaintza sobre el grupo en cuestión permitieron establecer la existencia de pequeños ‘zulos’ utilizados por el grupo para la ocultación de diversos tipos herramientas y efectos, (mazas, hachas, cortafríos, palanquetas, amoladoras, discos abrasivos) utilizados en la comisión de los robos. Se ubicaban en varios puntos de una zona boscosa del barrio de Sorabilla de la localidad de Andoain, Gipuzkoa, lugar al que acudían los delincuentes antes y después de la comisión de los asaltos, con el fin de pertrecharse para los mismos.
En los vehículos intervenidos también fueron localizados cinco equipos transmisores-receptores portátiles, herramientas, dinero, así como ropa y calzado para cambiarse con el fin de modificar su aspecto a la hora de cometer los robos. Dos de los walkie-talkie, uno en cada vehículo, estaban operativos e interconectados entre sí en el momento de la actuación policial.
A los detenidos les fueron confiscados asimismo diferentes documentos de identidad falsos. Sobre uno de ellos pesaba una orden de detención de un Juzgado de lo Penal de Donostia, y otro de ellos tenía prohibida su entrada en el país hasta el año 2025, a raíz de la comisión de delitos anteriores.
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