El día del encendido navideño, entre miles de personas en la calle, también disfrutaban de las luces nocturnas algunos mayores de las residencias. Lo hacían bien tapados y en los triciclos de Bizikletaz Adinik Ez, cuya presencia cada vez es mayor en la ciudad y en la vida de los donostiarras. «Nuestra colaboración con Fomento San Sebastián para estas fechas se inició el año pasado, las dos partes acabamos muy contentas y hemos repetido con un mayor número de salidas previstas. En consecuencia más personas mayores y diversidad funcional podrán disfrutar del alumbrado navideño», explicó Iñigo Munilla, el alma máter de esta iniciativa
A lo largo de estas Navidades se beneficiarán de este acuerdo 20 entidades de distintos tipos: residencias y centros de día, hogares de jubilados, fundaciones…
Los triciclos salen desde la plaza Ramón María Labayen y continúa por las casetas del río para posteriormente encarar el Centro (calle Loiola, los Relojes, Alderdi Eder (con parada obligatoria en la noria), la Parte Vieja hasta el Kursaal y vuelta al inicio. «La parada junto a los belenes para comer unos churros o unas castañas también es clave», añadió Munilla.
Solo estas Navidades disfrutarán gracias a esta iniciativa y al apoyo de Fomento San Sebastián 105 personas que estarán atendidas por 45 voluntarios.
En este punto Munilla siempre destaca el «papel esencial» de los voluntarios que no se limitan a conducir. También dan conversación (o la reciben en la mayoría de los casos) y tratan con mucho cariño a los viajeros. «El grado de fidelidad y sentido de pertenencia de estos voluntarios a Bizikletaz Adinik Ez es muy alto. Sin su presencia este proyecto no sería posible, son el alma y la base«, aseguró Munilla.
«Lo que cuentan los voluntarios es que ellos también reciben mucho durante los paseos. Los mayores les transmiten calidez, ternura y mucho agradecimiento. Cuentan sus vivencias. Por ejemplo hablan de cómo era su vida laboral, dónde han vivido, cómo vivían antes la Navidad… y opinan sobre ciudad y sus cambios, si les gusta o no el alumbrado, etc. La verdad es que de esas salidas salen muchas anécdotas».
Visto el éxito de estos viajes nocturnos… resulta inevitable pensar en otros periodos del año. «Bizikletaz Adinik Ez trabaja todo el año excepto una primera semana en agosto y otras dos en enero. Pero nuestra actividad no debe parar ya que existe mucha necesidad de acompañar y conectarse con el exterior y de construir nuevas relaciones humanas. Sí que es verdad que esta experiencia te hace pensar en nuevas actividades nocturnas. ¿Quizá en las noches de verano», se pregunta Munilla.
Lo cierto es que las fiestas de Donostia tienen este año en que la ciudad es Capital Europea de la Navidad junto a Génova un ingrediente solidario importante de la mano de las asociaciones voluntarias de la ciudad. Incluso está previsto que en enero un barco solidario zarpe tanto por la mañana como por la tarde desde Loiola permitiendo a dichas asociaciones disfrutar del paseo hasta la desembocadura del río y darse a conocer.
En la caseta solidaria ubicada en el Mercado de Navidad están pasando a lo largo de todos estos días Rodovid (primer centro ucraniano de Euskadi), ECOKafea, Zaporeak, Aita Mari, Aspace, UNICEF, Cáritas, Pausoz-Pauso, Kalapie o Gipuzkoa contra el cáncer. Programa de Gabonetako Azoka, aquí.
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