‘Dando Vida a la Muerte’, un año más, para romper el mayor tabú de todos

El Festival Dando Vida a la Muerte (FDVM) se celebrará por cuarto año consecutivo a nivel estatal en diversos municipios de Euskal Herria, entre ellos Donostia. El objetivo principal de estas acciones es facilitar a las personas la reflexión sobre la muerte.

En el Festival se incluirán eventos a nivel nacional que se pueden seguir on-line previa inscricpción a través de la página www.dandovidaalamuerte.org, así como actividades comunitarias que incluyen Death Cafés, el muro “Antes de Morir Quiero...” y música en el cementerio.

Música

Los días 31 de octubre y 1 de noviembre de 12 a 14 horas en el Cementerio de Polloe las visitas al cementerio estarán acompañadas por el sonido de la música. Información sobre el año pasado, aquí. 

Antes de morir quiero

Del 1 al 5 de noviembre en el paso peatonal del Túnel del Antiguo se llevará a cabo una iniciativa que antes se hacía junto a Tabakalera. El proyecto originariamente denominado “Before I die” (New Orleans, Candy Chang, 2011) es un proyecto de arte global que invita a las personas a reflexionar sobre su mortalidad y considerar las cosas que más les importa en la vida.

La pared original fue creada en una casa abandonada en Nueva Orleans por la artista Candy Chang después de la muerte de alguien a quien amaba. Desde entonces se han creado más de 5000 muros en 78 países de todo el mundo y en 35 idiomas.

Los interesados podrán acercarse al muro expuesto al aire libre donde podrán expresar sus sentimientos
con una tiza.

Death Café

El 4 de noviembre de 11:30 a 13:00 horas se formarán dos grupos, uno en euskera y otro en castellano. Hay que apuntarse en [email protected] o llamando al número de teléfono 943483878. Las plazas son limitadas. 

Death Cafe o los Cafés de la Muerte es un concepto que fue desarrollado por Jon Underwood y su madre Sue Barsky en 2011 en Inglaterra, basado en las ideas de Bernad Crettaz.

Se trata de un encuentro distendido para hablar libremente de la muerte y su proceso, sin agenda ni expertos, en compañía y frente a un café y un bizcocho.

El objetivo es fomentar la conciencia social de la muerte desde varios puntos de vista para valorar la vida y romper el tabú que supone. Visita a los cementerios de Altza, Pollo e Igeldo (información práctica), aquí.