En el transcurso de este año han sido detenidas por la Ertzaintza en Gipuzkoa cuatro personas y se ha investigado a una veintena por engañar a personas mayores y, con la supuesta intención de venderles productos editoriales, hacerles firmar compromisos con entidades de crédito que les comprometen a efectuar pagos periódicos anuales. Entre los casos denunciados destacan los 87.000 euros a los que tuvo que hacer frente este pasado verano un pensionista de Andoain a quien lograron engañar para que fuera firmando sucesivos contratos para la adquisición de nuevas colecciones, una firma que le obligaba a seguir ligado a dicha a entidad financiera y a seguir pagando durante varios años.
La Ertzaintza ha alertado a la ciudadanía sobre la proliferación de estafas mediante ventas fraudulentas realizadas a domicilio a personas mayores, que por medio de engaños efectúan compras de distintos artículos, especialmente productos editoriales, contratos que suelen ser fraudulentos y están ligados a entidades financieras de crédito que les comprometen a efectuar pagos periódicos anuales y habitualmente los firmantes no son conscientes de dicho situación. La estafa se traduce en el engaño y coacción a las víctimas mediante llamadas reiteradas y visitas asiduas al domicilio del comprador. Aprovechándose de su vulnerabilidad los estafadores les exigen distintas cantidades de dinero aduciendo a clausulas incluidas en la firma y que las víctimas desconocen o como pago final para finiquitar el contrato. En ocasiones este proceso de liquidación vuelve a llevar a la víctima, otra vez sin ser consciente de lo que firma, a concatenar sucesivos contratos de compra.
En el transcurso de este último año y en relación con esta tipología delictiva de estafas y coacciones la Ertzaintza ha abierto 25 atestados en Euskadi: 17 en Gipuzkoa y 8 en Bizkaia. Como resultado se han practicado cuatro arrestos y se han abierto diligencias como investigados a una treintena de personas. En Gipuzkoa la actuación itinerante de los autores ha tenido mayor incidencia en las demarcaciones de Hernani, Donostia y Tolosaldea y más recientemente en las comarcas de Deba-Urola y Urola-Kosta. En este territorio se han practicado los cuatro arrestos y las personas investigadas ha sido una veintena.
La actuación fraudulenta de los autores, varones de mediana edad, se inicia con la visita a domicilios de personas mayores que viven solas, cuyo entorno y circunstancias familiares previamente han investigado. Tras ganarse su confianza los vendedores ofrecen distintos productos de diferentes empresas. En la mayor parte de los casos denunciados los autores están supuestamente vinculados a empresas editoriales y presentan para la venta ediciones exclusivas de coleccionista debidamente acreditadas mediante acta notarial. Tal y como se ha podido determinar, mediante la utilización de prácticas de venta agresiva y confusa, los estafadores consiguen que las víctimas, dada su naturaleza vulnerable, firmen los documentos sin realmente ser conscientes del contenido del contrato de compra. Estos habitualmente están ligados a entidades financieras de crédito que comprometen al firmante a pagos periódicos que pueden prolongarse varios años, aunque también se dan casos de pagos mediante transferencias. El valor de alguno de estos productos editoriales se sitúa entre los 3.000 y los 5.000 euros.
El proceso de la estafa se inicia cuando dichos vendedores comienzan a acosar a la víctima habitualmente mediante reiteradas llamadas telefónicas y asiduas visitas a su domicilio. La coacción se concreta con la exigencia de pagos que la víctima debe abonar al tiempo que se le recuerdan las consecuencias económicas y legales que puede acarrear su negativa. Se les insta a abonar distintas cantidades de dinero como pagos adicionales que se contemplaban en el contrato firmado y cuyo contenido la víctima desconoce. Para ello los estafadores se desplazan al domicilio o acompañan a la víctimas hasta su entidad bancaria para que saquen el dinero estipulado o realicen una transferencia a sus propias cuentas. En otras ocasiones, cuando la víctima muestra su hartazgo o intención de finalizar el contrato, se le exige un pago final a modo de IVA, indispensable para realizar el finiquito del contrato. Dado que este proceso de liquidación precisa otra firma del comprador, se han dado casos en los que los estafadores han engañado nuevamente a la víctima, que con esa acción y sin saberlo, ha vuelto a contratar otra colección. Esta situación ha provocado que en varios casos investigados las víctimas hayan tenido que solicitar préstamos para poder hacer frente a dichos pagos. Este extremo ha llevado muchos de ellos a situaciones de desesperación y graves estados de endeudamiento.
La Ertzainta recomienda no permitir la entrada en el domicilio a ninguna persona cuyo servicio no haya sido solicitado, no firmar ningún documento cuando se tengan sospechas, solicitar toda la información o documentación para leerla con calma y poder recibir asesoramiento de familiares o amistades, alertar a personas del entorno en caso de duda o sospecha, evitar tomar decisiones precipitadas, no realizar pago en metálico a la persona vendedora, no facilitar datos personales telefónicamente, recordar que existe un plazo legal de 14 días para desistir de la compra y ante cualquier sospecha no dudar en llamar al 112
Cuatro detenidos en Gipuzkoa y 20 investigados por estafar a personas mayores con ventas a domicilio
En el transcurso de este año han sido detenidas por la Ertzaintza en Gipuzkoa cuatro personas y se ha investigado
Foto de archivo: Santiago Farizano
Deja un comentario