El Colectivo de Víctimas del Terrorismo (COVITE) ha concedido su XIX Premio Internacional al periodista José María Calleja, fallecido el pasado 21 de abril a causa de la COVID-19, en reconocimiento a su dedicación profesional y personal a defender los derechos de las víctimas del terrorismo. El acto ha comenzado con un discurso de la presidenta de COVITE, Consuelo Ordóñez. “Calleja cambió mi vida, me ayudó con el duelo por el asesinato de mi hermano Gregorio transformando mi tristeza en una lucha constructiva contra el terror”, ha manifestado.
En su discurso la presidenta de COVITE ha remarcado que “Calleja solía decir que en los medios de comunicación había un empacho de información sobre cómo son los que matan y un preocupante déficit sobre las vidas de las víctimas, y que por eso escribió ‘Contra la barbarie”. Consuelo Ordóñez ha lamentado que “hoy, más de veinte años más tarde de la publicación de su importantísima obra, tengo que lamentar que los que mataban y sus cómplices sigan teniendo más protagonismo en la vida pública que sus víctimas”.
En referencia a la negociación presupuestaria del Gobierno, la presidenta de COVITE ha denunciado que “quienes siempre dirigieron ETA desde la comodidad de sus despachos hoy hacen política con alfombra roja, mercadean con nuestro derecho a la justicia y reclaman la excarcelación de los asesinos de nuestros familiares como moneda de cambio para apoyar unos presupuestos generales del Estado”. “Y el Gobierno, en lugar de levantarse de la mesa y dar un portazo a quienes exigen negociar nuestros derechos, sigue sentándose con ellos. Si finalmente aprueban los presupuestos con el apoyo de quienes siguen exaltando, legitimando y amparando el terrorismo que nos convirtió en víctimas, el portazo nos lo habrán dado a las víctimas”, ha advertido Ordóñez.
Consuelo Ordóñez ha entregado el XIX Premio Internacional de COVITE al hijo de José María Calleja, Mikel Calleja, quien ha dado un emocionado discurso reconociendo lo mucho que ha influido su padre en su vida y lo mucho que lo echará de menos. Tras el discurso de Mikel Calleja ha intervenido el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, quien ha destacado que “fue el primer referente de dignidad para muchos de nosotros, especialmente para los que vivíamos en el País Vasco y no nos atrevíamos a alzar la voz por miedo a la banda terrorista ETA”. “Siempre voy a tener presente el ejemplo de una persona como José Mari, que nos dio a todos la dosis de valentía necesaria para luchar contra el terror y nos tocó en la conciencia a todos para avanzar en sociedad”.
Después del discurso del ministro del Interior, Maite Pagazaurtundúa, Fernando Savater y Luis Castells han recordado la faceta de activista contra ETA de José María Calleja. Todos han destacado la facilidad de José Mari para hacerles reír. “José Mari fue nuestra voz en la prensa, en la televisión. Esa voz no la teníamos. Era una voz que razonaba y rompió la dinámica de atribuir cierta culpabilidad a las víctimas del terrorismo de su propia tragedia. Fue el primer periodista en argumentar en contra de la violencia y de la ideología política que llevaba a perpetrar los atentados terroristas. Esa fue su gran aportación. En definitiva, tuvo un gran papel en la resistencia contra la violencia etarra y contra la política que amparaba el terrorismo”, ha apuntado el filósofo Fernando Savater. “No solo fue un periodista que contaba las cosas, sino que era capaz de darlo todo como persona para ayudarnos a quienes estábamos naufragando en una situación absolutamente tóxica”, ha reconocido Maite Pagazaurtundúa.
La siguiente mesa redonda ha estado protagonizada por los periodistas María Jiménez, Gorka Angulo y Ana Aizpiri, quienes han recordado cómo era José Mari Calleja como periodista. Los tres han coincidido en que gracias a Calleja hubo un antes y un después en el tratamiento periodístico que se dio al terrorismo y a sus víctimas. “Su actuación como periodista era la de un ciudadano comprometido con la democracia y con la libertad. Ese compromiso se reflejaba en todas sus producciones periodísticas”, han apuntado los tres ponentes. “José Mari Calleja fue siempre él mismo incluso cuando las circunstancias no le permitían ser uno mismo. Eso es la dignidad”, ha subrayado Gorka Angulo.
En la tercera mesa redonda han participado Ramón Jáuregui, Borja Sémper y Gorka Landaburu, quienes han destacado la faceta de defensor de la democracia española y de “lo bueno de España”, en palabras de Ramón Jaúregui. “Él reivindicaba la Constitución como elemento vertebrador de la democracia española frente a la estrategia de los nacionalistas de denostar a España y sus logros democráticos”. Jáuregui ha destacado que “la derrota del terrorismo de ETA es un enorme logro de la democracia que también se lo debemos a José Mari”.
Joaquín Müller-Thyssen, Adolfo Ayuso y Eduardo Ranz, amigos de José María Calleja de su etapa en Madrid, han recordado al periodista y escritor en la última mesa redonda del homenaje. La clausura del acto la han protagonizado Millán Gómez, alumno de José María Calleja en la Universidad Carlos III de Madrid, y el escritor Raúl Guerra Garrido, quien recogió el XVIII Premio COVITE el 1 de mayo de 2019 junto al también escritor Fernando Aramburu.
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