El Colectivo de Víctimas del Terrorismo (COVITE) concede su XIX Premio Internacional al periodista José María Calleja, fallecido el pasado 21 de abril a casusa del Covid 19, en reconocimiento a su dedicación profesional y personal al defender los derechos de las víctimas del terrorismo. El acto de entrega del galardón se celebrará el sábado 3 de octubre a las 12 horas en el Palacio de Miramar en San Sebastián. «Queremos mostrar públicamente nuestra gratitud por su labor y por habernos acompañado en tiempos muy difíciles», aseguró la presidente de COVITE, Consuelo Ordoñez.
Calleja estuvo ligado a COVITE y a quienes lo integran desde antes de que se fundara el colectivo, ya que se involucró en las primera iniciativas pacifistas dirigidas por Cristina Cuesta, hija de Enrique Cuesta, asesinado por los Comandos Autónomos Anticapitalistas el 26 de marzo de 1982, y fundadora de COVITE.
«Perteneció al grupo de ciudadanos que se manifestaban pública y abiertamente en contra del terrorismo cuando nadie lo hacía y sin haber sido víctima directa de ETA. Su oposición al terror sería lo que, con el tiempo, lo convertiría en potencial objetivo de ETA», explicó Ordóñez.
En 1977 el periodista asumió un gran riesgo personal cuando en 1997 publicó el libro ‘Contra la barbarie’, el primero sobre el terrorismo de ETA escrito desde la perspectiva de las víctimas. Trabajó en Eitb dirigiendo el Teleberri entre 1987 y 1995 y fue redactor jefe en CNN+ entre 1999 y 2010.
Desde COVITE recuerdan que también se posicionó contra el franquismo y alzó la voz sobre los crímenes que se cometieron durante el régimen; y, más recientemente, se convirtió en un importante activista por las víctimas de la violencia machista. «Fue una de las nuestras más fieles amigos y referentes. Nos defendió cuando nadie lo hacía, cuando en Euskadi las víctimas estábamos condenadas al silencio. Utilizó el altavoz que le proporcionaba su condición de periodista para darnos voz y defender nuestros derechos», explicó Ordoñez.
El Premio Internacional COVITE ha recaído en los últimos veinte años en personas y colectivos que han destacado por su papel en la lucha contra el terrorismo y por su comportamiento cívico ejemplar. El año pasado los premiados fueron los escritores Fernando Aramburu y Raúl Guerra Garrido, quienes destacan por su gran contribución al relato de las víctimas del terrorismo.
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