(EFE). La muerte de dos jóvenes de 20 y 22 años en un accidente de tráfico ocurrido en la GI-636, en el término municipal de Lezo, ha consternado a Gipuzkoa, donde se sigue con atención la evolución de los heridos, especialmente la de una joven ingresada en la UCI que viajaba en el mismo coche que los fallecidos.
El conductor del turismo que chocó contra el de los fallecidos, un varón de 21 años y nacionalidad francesa, fue detenido acusado de un delito contra la seguridad vial y otro de homicidio por imprudencia grave, según informó el Departamento vasco de Seguridad.
El arrestado continúa este lunes ingresado en el Hospital Donostia para ser atendido de las lesiones que presenta y, una vez dado de alta, será puesto a disposición judicial.
En este mismo centro sanitario, en la Unidad de Cuidados Intensivos, permanece la joven que resultó herida muy grave en la colisión frontal entre los dos turismos. Otro joven que viajaba en este vehículo también permanece hospitalizado.
El siniestro se produjo ayer, domingo, sobre las cuatro menos cuarto de la madrugada, en la variante de Errenteria, en el término municipal de Lezo y se saldó con dos fallecidos, vecinos de Lezo y San Sebastián, y cinco heridos de diversa consideración.
Los alcaldes de Lezo y Pasaia, Mikel Arruti y Teo Alberro, respectivamente, han expresado, en declaraciones a los periodistas, la «consternación» que existe desde ayer en ambos municipios con los que tenían una fuerte vinculación los fallecidos y heridos que viajaban en el Ford Orion.
Mikel Arruti ha dicho que «siempre es difícil» de sobrellevar la muerte de un joven, pero «seguramente es más duro» todavía «si se produce en estas circunstancias».
«Lezo es un pueblo pequeño y nos conocemos todos. No hay palabras para aliviar el dolor de los familiares y amigos» de las víctimas, ha lamentado Arruti, al tiempo que les ha transmitido el «calor de sus vecinos y sus condolencias» y ha deseado que mejore la situación de los heridos.
La misma sensación se vive en Pasaia, según ha afirmado su alcalde, quien ha recordado que uno de los jóvenes que perdió su vida en el accidente, «administrativamente vivía en San Sebastián», aunque «hacía su vida» en este municipio, al que también está vinculada la joven herida muy grave, cuya evolución se sigue desde ayer con preocupación.
«No hay palabras de consuelo ante un suceso tan trágico como este», ha remarcado Alberro, quien ha expresado su «más sinceras condolencias» al entorno de las víctimas en un «momento tan difícil».
La Ertzaintza ha puesto en marcha una investigación con el fin de esclarecer las circunstancias de este accidente en el que un BMW 116, conducido por el detenido y ocupado por otras dos personas, chocó contra el coche en el que viajaban cuatro chicos guipuzcoanos, dos de los cuales murieron en el mismo lugar del siniestro.
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