(EFE). El profesor acusado de abusar sexualmente de una alumna de 12 años de un centro educativo de Irun (Gipuzkoa) en el curso 2016-17 ha sido condenado este lunes a cuatro años de prisión.
En una sentencia a la que ha tenido acceso EFE, la Audiencia de Gipuzkoa considera al procesado responsable de un delito de abuso sexual por el que, además de la citada pena de cárcel, le impone cinco años de libertad vigilada.
Asimismo, le prohíbe acercarse a su víctima o comunicarse con ella durante seis años, le inhabilita para desempeñar cualquier profesión que conlleve contacto con menores durante siete años, y le obliga a compensar a la perjudicada con 6.000 euros.
La resolución judicial explica que los hechos sucedieron en una fecha indeterminada del citado curso escolar, cuando el acusado aprovechó el tiempo entre la comida y las clases, en horario de tarde, para dirigirse a un grupo de cuatro niñas de otra clase que jugaban en el patio y ofrecerse a supervisarlas dentro de un aula, debido al mal tiempo que hacía fuera.
Las menores entraron entonces en una clase y se sentaron en torno a cuatro mesas agrupadas, donde el procesado les ofreció a cada una folios y rotuladores para que pintasen.
Seguidamente se situó en una silla junto a la de la víctima y, «mientras le agarraba la rodilla», le explicó cómo tenía que situarse para dibujar, tras lo que «comenzó a masturbarse junto a su mano izquierda» hasta que «sonó el timbre que indicaba el fin del recreo y la menor salió del aula».
La sentencia no es firme, ya que aún puede ser recurrida en apelación ante el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV).
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