Ni el vecindario de la zona de Marrutxipi ni las familias de la ikastola Zurriola aceptan la posibilidad de que en el enclave en que estaba prevista la construcción del parque infantil Sorleku se termine levantando un aparcamiento disuasorio, posibilidad que se viene debatiendo estas últimas semanas dentro y fuera del Ayuntamiento donostiarra.
Este jueves por la tarde ha tenido lugar una concentración en el parque Maritxu Guler donde han predominado los colores y el buen humor, y donde se ha defendido el proceso de participación ciudadana que desembocó en el que iba a ser el nuevo parque infantil Sorleku, que el vecindario lamenta que «ahora está en el aire».
En todo caso las familias de la zona se han concentrado para hacer llegar su mensaje a las autoridades y aseguran que volverán a hacerlo si lo consideran necesario. (Más información, aquí)
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