Un centenar de personas se ha concentrado este sábado en la plaza Santiago de Pasaia para «contrarrestar los discursos fascistas» y pedir una respuesta popular contra «la violencia» que en los últimos días, «de forma cada vez más cruenta», se dirige a los inmigrantes del norte de África.
«En las últimas semanas se han llevado diversas movilizaciones para expulsar a extranjeros residentes de Pasaia y se les ha tratado con violencia», han dicho los representantes vecinales en un comunicado en que hablan de «palizas por las noches» y permanentes «comentarios racistas» en las redes.
«Se intenta culpar a estas personas de todo lo que ocurre«, aseguran, y de ahí que se haya realizado esta concentración.
El inicio de esta escalada de conflictos comenzó con la ocupación de un local a finales de verano en Trintxerpe. Posteriormente se produjeron denuncias vecinales sobre inseguridad y algunas peleas, una muy notoria. En paralelo comenzaron unas manifestaciones ciudadanas contra la inseguridad, de carácter pacífico, de las cuales surgieron las patrullas ciudadanas de carácter violento a las que hoy se ha hecho mención durante el encuentro.
En este contexto el Ayuntamiento de Pasaia expresó su «profunda preocupación por los graves acontecimientos que se están produciendo en los últimos días en Trintxerpe», y abogó por el restablecimiento de la convivencia y seguridad en el citado distrito.
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