(EFE). Compañeros del vigilante de seguridad muerto el pasado 26 de enero en el puerto de Pasaia y otros empleados portuarios se han concentrado este miércoles ante una de las entradas a la infraestructura para protestar por este accidente laboral mortal y exigir más inspecciones y controles por parte de las autoridades.
En torno a un centenar de personas han participado en la movilización, que había sido convocada por el comité de empresa de Sabico Seguridad, la empresa en la que trabajaba el vigilante que perdió la vida la noche del pasado viernes al ser atropellado por un camión durante la maniobra de carga de mercancía a un barco.
La concentración se ha celebrado a partir del mediodía delante del acceso al recinto portuario desde La Herrera, en el distrito pasaitarra de Trintxerpe, con una pancarta con el lema en castellano y euskera «La precariedad mata. Más inspección. No más accidentes de trabajo».
A la protesta, además de delegados del comité de UGT, ELA y USO, han asistido también vigilantes de Sabico de otros lugares de trabajo y operarios de estiba y desestiba del puerto guipuzcoano, así como empleados de varias empresas que operan en la infraestructura.
Tras la concentración, que ha transcurrido en silencio durante media hora, el responsable del sector de la seguridad privada en UGT, Isidro Campo, ha vuelto a insistir en la exigencia de que se lleve a cabo una «investigación exhaustiva» sobre el accidente del pasado viernes en el que murió el vigilante, un guipuzcoano de 47 años.
«Exigimos que se investigue a fondo lo ocurrido porque está claro que algo falló», ha declarado Campo a EFE, tras lo cual ha pedido que «se depuren responsabilidades, sobre todo, para que no vuelva a suceder».
El representante sindical ha reclamado además «la modificación de la ley de prevención de riesgos laborales porque «ha quedado obsoleta» y a la Autoridad Portuaria de Pasaia le ha exigido que «garantice que las empresas que operan en el puerto cumplan todos los requisitos y protocolos de actuación establecidos».
El sindicato ELA por su parte ha difundido este miércoles un comunicado en el que ha denunciado «la impunidad de los empresarios y la complicidad de las instituciones públicas» y ha pedido aumentar la plantilla de la Inspección de Trabajo.
«Los datos demuestran que la prevención de riesgos laborales no se hace o, si se hace, se queda en papel mojado», ha denunciado la central nacionalista que ha agregado que, tras casi 30 años de vigencia de la ley de prevención, «los empresarios siguen incumpliendo la normativa con total impunidad» y con «la complicidad de las instituciones públicas, que renuncian a establecer medios suficientes de vigilancia».
A su juicio, «la ineficacia de Osalan (el Instituto Vasco de Seguridad y Salud Laborales) es palpable y la inspección de trabajo está totalmente colapsada por la falta de medios».
ELA ha reclamado asimismo al Gobierno Vasco que, «siguiendo las directrices europeas, amplíe la plantilla de la Inspección de Trabajo, hasta 120 personas, con el fin de poder controlar las condiciones de seguridad que hay en los centros de trabajo» de Euskadi.
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