(EFE). El ente público que gestiona fondos para ayudar a empresas, Cofides, ha aceptado una quita a la deuda de 15 a 8,5 millones de euros a Astilleros Balenciaga, lo que despeja el principal escollo que tenía que superar la empresa para evitar el ERE de extinción, han confirmado a EFE fuentes cercanas a la operación.
No obstante, las mismas fuentes han precisado que se trata de un «preacuerdo» ya que todavía quedan «flecos pendientes» que habría que cerrar con otros acreedores para que pueda salir adelante, entre ellos algunas entidades financieras que todavía no habrían dado su visto bueno.
De momento, la quita parcial, que contaría con la aprobación del administrador concursal de Astilleros Balenciaga, despeja el camino para encontrar algún inversor antes del próximo día 31 y evitar el expediente de regulación de empleo (ERE) de extinción de la firma.
Fuentes próximas a la compañía han recalcado que es cierto que con la quita parcial de Cofides se abre «la puerta» para llegar a buen puerto, pero han recalcado que el acuerdo es mucho más amplio, atañe a más instituciones y «no está escrito ni cerrado».
Han explicado que la decisión de Cofides ha permitido a la firma desatascar la venta de dos barcos fabricados en el astillero de Zumaia por un importe de 17 millones de euros, parte del cual se destinará a abonar la deuda pendiente con el ente público.
Han asegurado que por la empresa han pasado en los últimos ocho meses «numerosos inversores» aunque en este momento hay dos realmente interesados, en un «análisis avanzado», a los que habría que allanar el camino para reflotar la empresa y salvar la plantilla, integrada por 70 trabajadores.
Por su parte, el alcalde de Zumaia, Iñaki Ostolaza, quien ha participado en distintas mesas negociadoras para evitar el cierre de Balenciaga, ha coincidido en que la quita de parte de la deuda de Cofides abre la puerta a la esperanza, aunque ha apelado a la prudencia.
En el momento en el que el acuerdo sea firmado y sellado, Ostolaza ha explicado, en declaraciones a EFE, que llegaría el momento de facilitar la entrada de inversores a través de un plan de viabilidad como, por ejemplo, ocurrió en el caso de Talgo en el que se involucró el Gobierno Vasco apoyando al inversor y también a las entidades financieras.
El alcalde ha señalado que es importante tener en cuenta que el arranque del astillero exigirá financiación en un momento en el que además la factoría parte «de cero».
El comité de empresa será informado por el administrador concursal este mismo viernes en una reunión en Zumaia (Gipuzkoa) del avance de las negociaciones y de la quita de parte de la deuda de Cofides que se acordó el pasado miércoles en una reunión que mantuvieron en Madrid el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, y el consejero de Industria, Mikel Jauregi.
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