La compraventa de viviendas ha caído un 20% en San Sebastián con respecto a 2022, registrando en julio de este año los datos más bajos desde 2013. A pesar de esta caída, el precio de la vivienda sigue aumentando y creció en el segundo trimestre de 2023 un 10% con respecto al mismo periodo del año pasado. Todo ello se desprende de un informe de Areizaga Inmobiliaria a partir de datos del Notariado.
Jaime Euba, responsable de Residencial en Areizaga Inmobiliaria, explicó que «este fenómeno se observa en todo el mercado a nivel nacional y se explica por la presión que sigue ejerciendo la demanda sobre una oferta menguante. En 2013 contábamos con más de 2.300 viviendas en venta y en 2023 apenas superamos las 1.100 cuando cada año aumenta la población y el número de hogares de Donostia».
Según Euba en el mercado inmobiliario donostiarra se observan dos velocidades: por un lado, se reduce la demanda de compradores que dependen de financiación debido al alza en los costos de las hipotecas. No obstante, en el segmento de viviendas de lujo se observa un aumento del 17% en las transacciones «porque este mercado, al prescindir de financiación y ser un valor refugio, no se ve afectado por la restricción en las condiciones crediticias».
En la provincia de Gipuzkoa la proporción de viviendas en venta con respecto al total construido se sitúa entre las más bajas a nivel nacional, alcanzando el 1,8%. Solo por delante de Navarra, con un 1,6%, y Soria, con un 1,1%. En comparación, la media nacional es del 4,4%. Por otro lado, en Bizkaia la cifra asciende al 3%, mientras que en Álava se registra un 2,7%.»
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