«Mereció la pena. Volvería a comprometerme por la convivencia y la libertad aunque fuera a costa de mi juventud«. Borja Sémper deja la vida política en que lleva sumido 25 años y lo hace con el estilo moderado que ha caracterizado su actuación en todos los puestos que ha ostentado. Su renuncia al Parlamento vasco y al Ayuntamiento donostiarra ha motivado todo tipo de elucubraciones. Sin embargo y pese a las preguntas de los periodistas se ha mantenido firme y elegante: «No hay más lecturas. Es un fin de ciclo. Esta decisión responde a la necesidad de darle a mi familia otro entorno. Nunca es buen momento para abandonar una pasión«, ha afirmado en la sede del PP, en Amara, abarrotada de periodistas como nunca antes.
Dice Sémper que desde que se ha hecho pública su marcha ha recibido numerosas muestras de «respeto y afecto» y es cierto. Tanto de sus compañeros como de los rivales. Y ha hecho un balance positivo de estos años. «Entré en política en una Euskadi en que era necesario el idealismo y cuando suponía implicarte hasta las últimas consecuencias«, ha recordado, agradeciendo a los escoltas, Guardia Civil, Policía y Ertzaintza que hoy haya podido dar esta rueda de prensa.
«Hoy tengo una familia con la que puedo pasear tranquilo y quiero pensar que los políticos hemos contribuido«, ha manifestado visiblemente emocionado y defendiendo a ultranza la figura de quienes deciden dedicarse a la política.
«El clima que preside ahora la política española no es el que me gusta», ha reconocido una vez más. «Un rival político es un adversario, no un enemigo. Hay que preservar las formas«. Ha añadido que le incomoda este clima de confrontación y ha abogado por que retorne el respeto.
La espinita
Sémper se ha disculpado ante los votantes del PP donostiarra por abandonar el Ayuntamiento. «No es una decisión fácil pero sí necesaria para mi familia», y cuestionado sobre las «espinitas» que le quedan ha reconocido que le hubiera gustado ser alcalde de San Sebastián.
«Hoy me acuerdo de todos pero aún más de Gregorio Ordóñez, a quien he tenido presente todo este tiempo», ha expresado Sémper en su despedida. A partir de ahora trabajará en la multinacional Ernst & Young como director de Relaciones Institucionales.
Ha añadido que a muchos que le han acompañado los va a recordar «con cariño». «A los otros los he padecido durante años. En mí no encontrarán rencor pero tampoco olvido. No pudieron matarme pero tampoco amargarme la vida», ha expresado el popular sin añadir nombres.
Opina que hay futuro para el PP vasco pese al complicado momento que atraviesa: «El PP vasco está forjado en las peores circunstancias, las de hoy sólo son complicadas. Saldremos adelante. Hay un espacio político para ello«, ha asegurado, con buenas palabras tanto para el presidente del partido en Euskadi Alfonso Alonso como para el nacional Pablo Casado.
«Me siento cómodo y agradecido en el PP. Es un partido plural que me ha permitido expresarme», ha asegurado Sémper, añadiendo que no se ha sentido «ninguneado».
En su despedida Sémper también ha enviado un mensaje a la población. «En política deberíamos implicarnos todos, sobre todo en estos tiempos», ha advertido, refiriéndose a la necesidad de preservar la libertad alcanzada en los últimos años por la sociedad española.
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