Iñaki Arrieta se dedica a los asuntos inmobiliarios, Andoni Zabala es arquitecto técnico y Shandra Cordovilla se ha metido de lleno en un área aún poco conocida, la del ‘home staging’, literalmente ‘puesta en escena de la vivienda’. Los tres están unidos por la red comercial BNI. Andoni desde que esta franquicia desembarcó en Donostia y sus dos compañeros desde hace poco mas de un año. ¿La clave?, que todos ellos, igual que la treintena de personas que forma parte de la red en San Sebastián, ejercen como comerciales para los demás.
Este viernes se celebrará en la Cámara de Gipuzkoa el quinto aniversario de BNI ‘Erronka’, 30 años después de que se plantara la semilla en Estados Unidos. Desde entonces han surgido grupos en todo el mundo siguiendo la filosofía comercial de compartir contactos. En el acto de la Cámara de Comercio se espera al alcalde Eneko Goia, al secretario y director de Cámara de Gipuzkoa Javier Zubia y a Euken Sesé, de Fomento San Sebastián, entre otros.
En el caso de Donostia cerca de 30 profesionales se reúnen a desayunar una vez por semana a horas intempestivas «para no interferir en los horarios de trabajo», dan a los otros profesionales detalles sobre su actividad («un poco al estilo americano, luego nos aplaudimos») y se van todo a sus oficinas con la conciencia de que a la mínima oportunidad deben lograr contactos para los demás. «Si como arquitecto técnico recurre a mí alguien que quiere vender un piso le doy el contacto de Iñaki Arrieta, esto funciona así», ilustró Andoni Zabala.
Hay una condición indispensable para que el sistema funcione: no hay dos profesionales que se dediquen a lo mismo porque surgiría un conflicto de intereses. «Puede haber dos abogados, pero deben estar en áreas distintas».
A partir de ahí en el listado de BNI ‘Erronka’ hay de todo: desde venta de colchones a una imprenta, un sexólogo, seguros, servicios financieros, mantenimiento de ascensores, pintor, arquitecto, ‘coaching’…
Las cifras que maneja BNI sobre su trabajo en San Sebastián estos cinco años impresionan: con más de 6.700 referencias logradas se han generado más de 7 millones de euros (la mayor parte el último año). Que se dice pronto.
No todo son derechos y beneficios. Año tras año se ‘revisa’ el trabajo de cada miembro, lo que ha obtenido y los contactos que ha ofrecido a los demás. Y su asistencia a los encuentros, ya que como máximo puede faltar a tres desayunos en seis meses. Además de eso afronta una cuota mensual con la que, como explica Shandra Cordovilla, «lo que pagas es en realidad la rigurosidad del método y la confianza que se da entre las personas del grupo».
Por otro lado, tal y como añade Arrieta, el hecho de que BNI esté en todo el mundo es un plus para tener en cuenta: «Un socio de aquí, de Donostia, tiene mucho contacto con Alemania. Viaja y sabe que en los grupos de allí le reciben con los brazos abiertos».
En Eibar hay otro grupo de BNI y recientemente ha cerrado uno en Beasain, lo que pone de manifiesto que hay unos mínimos de población requeridos para que el grupo perdure. «Hay personas que se apuntan un año, se les presenta mucha carga de trabajo y se borran al siguiente. No pasa nada. A veces vuelven. La relación en muchos casos se mantiene con ellos aunque hayan salido», explicaron Arrieta, Zabala y Cordovilla.
BNI ‘Erronka’ cumple, en fin, cinco años de vida en Donostia con mucho futuro, opinan sus miembros. El evento del viernes en la Cámara de Gipuzkoa estará abierto a la participación de quienes quieran conocer el grupo. La inscripción es en [email protected] o en los teléfonos 630972760 o 633952762.
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