Sobre pisos turísticos ha vuelto a debatirse en el pleno del Ayuntamiento, hoy, donde ha vuelto a quedar constancia de que hay dos posturas irreconciliables en Donostia. En todo caso los votos de PNV, PSE y PP han aprobado definitivamente la modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que da cabida a la existencia de estas viviendas por encima de la primera planta tras una tramitación que ha sido convulsa y que en dos ocasiones se ha dado de bruces con la realidad por problemas formales de la ordenanza que se diseñó con este fin.
Hoy durante el pleno el rechazo de Elkarrekin Donostia en la voz de Haizea Garay y de EH Bildu en la de Reyes Carrere se ha fundamentado una vez más en el problema de la vivienda en Donostia.
Garay se ha referido al incremento en los precios del alquiler, ha criticado al gobierno municipal por «no escuchar a la sociedad» en este sentido y por «responder al interés de unos pocos», ha dicho, refiriéndose además a los fondos buitre que en muchos casos son los propietarios de estos pisos.
Por su parte Carrere han puesto el acento en que son 559 los pisos turísticos que se encuentran por encima de la primera planta en Donostia y recibirán ahora el visto bueno legal «mientras la ciudadanía padece la especulación». Y al igual que Garay ha justificado su rechazo en que se trata de una normativa que «va en contra de los intereses de la ciudanía».
La concejala de Urbanismo, Nekane Arzallus, ha hecho hincapié en que los reveses judiciales que sufrió la ordenanza no tenían que ver son su contenido, aprobado hoy, sino que tenían un carácter formal. Y ha asegurado que fue en 2016 cuando el gobierno municipal, de EH Bildu, proliferaron las viviendas turísticas y los hoteles.
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