Más de un mes después de que fuera licitada la incineradora el documento correspondiente ha recibido, hoy, la firma del diputado de Medio Ambiente y presidente del Consorcio de Residuos, José Ignacio Asensio. Este ya anunció la semana pasada que cuando fuera pública la sentencia del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco negando las medidas cautelares pedidas por GuraSOS la actividad en torno al controvertido proyecto se iba a precipitar. Y así ha sido.
Si se cumplen los plazos dados por el diputado en aproximadamente mes y medio comenzarán las obras en Zubieta pese a que aún está el tema en los tribunales. De hecho la plataforma GuraSOS explicó ayer tras conocer la sentencia que “queda pendiente la suspensión o no de la autorización ambiental integrada que resolverá la sección segunda del TSJPV”, y hoy han presentado un recurso contra la norma foral de presupuestos que en su disposición octava prorroga la vigencia del plan de residuos que debía concluir el año pasado.
El conocido por las instituciones como Centro Medioambiental de Gipuzkoa será construido por la UTE formada por Urbaser y las empresas guipuzcoanas LKS, Moyua, Murias y Altuna y Uría. Además Urbaser cuenta con el fondo francés Meridian Investments y con el tecnólogo alemán Steinmuller Babcok. También con el respaldo del grupo chino CNTY especializado en medio ambiente y gestión de residuos.
El responsable de Medio Ambiente ha calificado la futura incineradora de “moderna, eficiente y diseñada para ofrecer las soluciones que Gipuzkoa necesita para situarse al nivel de los países más avanzados. Todo ello en unas condiciones económicas ajustadas y competitivas, que permitirán un ahorro para el bolsillo de los gipuzkoanos”.
Estos argumentos, ya desarrollados por Asensio con detalle en diciembre, cuando el Consorcio de Residuos se decantó por Urbaser durante su encuentro, no convence a determinados grupos sociales. Uno de ellos es el Grupo de Estudios sobre Incineración y Salud (GEIS), formado por médicos, que esgrime datos negativos para la salud. Y a rebufo de éste han salido a la luz movimientos como GuraSOS, que piden un sistema más seguro para la salud y que cuente con consenso social.
Y aún hay otro elemento chocante en la historia de la incineradora, otro elemento que está pendiente. A primeros de enero el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 anuló la rescisión del primer contrato de la obra. Dicha rescisión fue aprobada en 2013 por la mayoría que Bildu tenía en el Consorcio de Residuos de Gipuzkoa. La rescisión de este contrato, que había adjudicado el PNV en 2011, conllevó el pago de 8 millones de euros en concepto de indemnización a las empresas adjudicatarias, y más 2 millones por los trabajos ya realizados.
Asensio firma la licitación y las obras de la incineradora empezarán en mes y medio
Más de un mes después de que fuera licitada la incineradora el documento correspondiente ha recibido, hoy, la firma del
El diputado Asensio. Foto: Diputación
Temas: movimientosreivindicativos
Deja un comentario