‘Txokos’ donostiarras recreados en postales con acuarela y lápiz grafito. Es lo que propone la artista Ángela Redondo, también periodista, en el BB Kafe de la Avenida de Tolosa 25. DonostiTik habla con ella sobre esta muestra.
¿Cómo surgió esta exposición?
Estaba buscando locales por la ciudad que me gustaran por el ambiente, su filosofía y el espacio, y pregunté en el BB Kafe si cabía la posibilidad de exponer. Enseguida me contestaron que sí. La verdad es que se agradece la oportunidad. Me parece que las cafeterías son un buen sitio para dar a conocer la obra porque pasa mucha gente y está en modo disfrutón.
¿Es la primera vez que muestra estas postales?
La mayoría no las he expuesto antes. Hace poco realicé otra exposición en la casa de cultura de Aretxabaleta pero era de otra temática, más vinculada a la naturaleza y a las estaciones del año. Además con el colectivo USK Donostia he mostrado puntualmente alguna obra en el restaurante Via Fora.
¿Cuáles son sus paisajes favoritos de la ciudad para plasmar?
Cualquier rincón me vale, siempre hay algo bonito u original en lo que recrearte. Desde un árbol a una fachada de un edificio, una farola o una persona inmersa en su lectura. Tengo una serie de temas recurrentes tanto en fotografía como en dibujo que, supongo, son inconscientemente los que más me llaman. Por ejemplo la isla Santa Clara o los parques y árboles.
¿Cuándo empezó a pintar?
Una vez escuché decir a alguien, ¿cuándo dejaste de pintar? Creo que todos de pequeños dibujamos, pero en algún momento dejamos de hacerlo. De muy pequeña siempre regalaba dibujos a todo el mundo y tenía carpetas por ahí llenas de garabatos. Hice hasta un cómic de mi perro. No sé, creo que el dibujo siempre me ha acompañado.
Ya en serio empecé con la fotografía analógica cuando tenía 17 años, experimentando con la doble exposición, y a veces llevaba esas fotografías al dibujo. Con la acuarela empecé hace diez años, más o menos.
¿Qué método sigue para elaborar estas postales?
Normalmente pinto en la calle. Empecé a salir con mis amigas Raquel y Arantxa a hacer bocetos. Siempre decimos en broma que somos como las pintoras de Montmartre. De hecho nuestro sueño es ir allí a pintar un día. Además nos enteramos de que en Donosti se creó un grupo de ‘urban sketch’ (USKDonostia), que es como se le llama a salir a dibujar por las ciudades. Y hemos participado en alguna quedada. A veces también pinto a partir de las fotos, sobre todo en invierno, cuando la climatología no acompaña. Me encanta la fotografía y para mí van de la mano.
¿Cómo compagina su trabajo de periodista con esta afición?, o ¿es más que una afición?
Pintar es para mí como meditar. Me ayuda a desconectar del día a día. Cuando estás pintando solo existe ese aquí y ahora. Tu cabeza se vacía totalmente de otros contenidos y el tiempo pasa volando. Hay momentos en los que, aunque tenga millones de cosas pendientes, mi cuerpo me pide solo ponerme frente a la hoja en blanco. Diría que más que una afición es una terapia.
¿Desarrolla alguna otra disciplina artística?
Juego también con la fotografía analógica, como ya he dicho. De ahí el nombre de mi instagram ’35mmpostcards’. Y me gusta picotear técnicas nuevas, grafito acuarelable, óleo, arcilla, escribir ideas con las que acompañar los dibujos, experimentar aunque no lleve a nada. Es como volver a ser niño y jugar, creo que todos deberíamos hacerlo de vez en cuando sin importar el resultado.
¿Qué precio tienen las postales del BB Kafe?, ¿nos da algún contacto para los interesados?
Pues con marco y todo entre 20 y 35 euros. También pueden proponerme encargos o comprar cualquier dibujo que les guste de mi IG @35mmpostcards, mandándome un mensaje directo.
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