La asociación en defensa del patrimonio, Áncora, tilda de «escándalo mayúsculo» la obra en la Estación del Norte, «que ha sido destruida so pretexto de adecuar sus instalaciones a la llegada de la Alta Velocidad».
«Hace pocas semanas desguazaban toda su estructura metálica, realizada en los talleres parisinos de Gustave Eiffel. Y ahora asistimos, con sorpresa e indignación, al derribo completo del edificio de viajeros. El escándalo es mayúsculo porque todas las informaciones garantizaban al menos la preservación de la fachada por tratarse de un bien protegido», denuncia la asociación, añadiendo que «las obras se están acometiendo con una notable falta de transparencia, ya que en ningún momento se ha podido consultar el proyecto del arquitecto Jon Montero, a pesar de las reiteradas peticiones que se han efectuado en el Ayuntamiento».
Áncora incide en que «las actuaciones sobre el edificio se desarrollan tras un muro pantalla de hormigón sobre el que han instalado una lona, convenientemente diseñada para impedir las miradas de curiosos y transeúntes».
Valor arquitectónico
Destacan los profesionales que esta estación de tren era uno de los monumentos más valiosos de la ciudad por su significado urbano.
«Ha sido puerta de entrada de innumerables viajeros durante los últimos 160 años y era la única estación de primera clase del Ferrocarril del Norte, que se conservaba en territorio guipuzcoano. El Plan General de 1995 le confirió su máximo nivel de protección reservado para aquellos inmuebles que poseen un valor histórico o arquitectónico singular o constituyen elementos fundamentales, no sustituibles, de la imagen urbana y la memoria histórica de la ciudad».
Recuerda Áncora que el Departamento de Cultura del Gobierno Vasco había propuesto declarar la Estación del Norte como Bien Cultural de Protección Especial, recomendando en todo caso intervenciones mínimas y reversibles, que fueran respetuosas con la autenticidad e integridad de la obra.
El edificio de viajeros fue proyectado por el ingeniero francés Alexandre Casimir Letourneur, siendo ampliado y embellecido en 1880, momento en que adquirió prácticamente la configuración que ha mantenido hasta el final.
Actualidad
En el año 2005 ADIF asumió la gestión de las estaciones del antiguo Ferrocarril del Norte, planteando actuaciones para su modernización.
Apunta Áncora lo siguiente: «La necesidad de introducir nuevas prestaciones técnicas no debería implicar la destrucción sistemática de nuestro patrimonio urbano: tanto Vitoria como Bilbao han logrado actualizar sus estaciones históricas con éxito gracias una inversión económica muy superior, que ha incluido además el soterramiento de las vías».
«En San Sebastián nos dolemos de haber perdido nuestros mercados de hierro del siglo XIX, y ahora nuestros munícipes deciden sacrificar otra infraestructura del mismo período, con un valor cultural equiparable. Áncora lleva tiempo denunciando que el PEPPUC no protege eficazmente el patrimonio donostiarra. La ficha urbanística revisada en 2021 reconoce el valor individual de la Estación del Norte, al tiempo que permite derribar y reconstruir sus fachadas, previsión insólita en cualquier Plan de Protección que es contraria a las Cartas Internacionales e infringe la legislación sectorial en materia de patrimonio cultural.
Imágenes del pasado 26 de abril: (Fotos) Demolición de la estación del Norte de San Sebastián
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