La asociación Áncora ha denunciado que no se ha tomado ninguna precaución para proteger el revestimiento marmóreo de Muebles Eceiza durante las obras del local, lo que ha llevado a que «la fachada histórica del establecimiento se haya perdido en su integridad». Áncora exige una explicación a la concejala Nekane Arzallus y advierte una vez más de que «recrear no es igual que «conservar».
En un comunicado Áncora lamenta que «en los últimos días se ha visto desaparecer con gran sorpresa la fachada de otro establecimiento centenario de San Sebastián, Muebles Eceiza, fundado en el año 1868. Era uno de los comercios más antiguos y emblemáticos de la ciudad, cuya historia aparece recogida en numerosas publicaciones de tema local».
Áncora recuerda que tras el cese de actividad del comercio se produjo el vaciado total del inmueble situado en el ángulo entre la Plaza Gipuzkoa y la calle Elkano. También que el proyecto inmobiliario promovido por el Banco de Sabadell preveía el derribo de este local para instalar en su lugar el acceso a un garaje robotizado de varias plantas.
«La noticia suscitó una considerable alarma ciudadana y la asociación Áncora se dirigió al Ayuntamiento denunciando las actuaciones de fachadismo que afectan a sectores cada vez más amplios del ensanche Cortázar (…) Estas operaciones se disfrazan de rehabilitación integral cuando en realidad van encaminadas a multiplicar el número de viviendas, obteniendo plusvalías millonarias». En opinión de Áncora esto genera una pérdida de identidad urbana.
Locales históricos
Áncora ha pedido la catalogación de los locales históricos de San Sebastián «en repetidas ocasiones». «Incluyendo el de Muebles Eceiza», apunta la asociación conservacionista.
Si no era posible conservar las antiguas yeserías y boiseries del interior del local, instó a que se mantuviesen su frontispicio realizado en mármol de dos colores. Lo componía un potente entablamento, sustentado por dos pilastras acanaladas de orden jónico que flanqueaban el escaparate.
Sin embargo ahora la asociación vuelve a lamentar «la falta de protección de los comercios históricos», así como los continuados derribos y actuaciones irrespetuosas que comprometen la autenticidad del conjunto urbano.
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