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Patrimonio

Áncora lamenta el incendio de Villa Beste Aldekoa y lo achaca a «su abandono»

La asociación denuncia que solicitó "en repetidas ocasiones la protección de esta villa de Ramón Cortázar: la última vez con motivo de la reciente revisión del PEPPUC, sin obtener respuesta municipal"

Incendio de Bestealdekoa en Loiola. Foto: Santiago Farizano

El incendio que ha calcinado la Villa Beste Aldekoa se ha debido al «lamentable estado de abandono en el que está todo el entorno», ha denunciado hoy la asociación patrimonialista Áncora en referencia al fuego que este mediodía se ha desatado en Loiola. Áncora denuncia que solicitó «en repetidas ocasiones la protección de esta villa: la última vez con motivo de la reciente revisión del PEPPUC, sin obtener respuesta municipal». 

En un comunicado la asociación recuerda que villa Beste Aldekoa sí llegó a estar incluida en una primera moratoria de derribos que adoptó el Ayuntamiento en noviembre de 2018 al considerar que en ella concurrían «elementos protegibles cuya evaluación y análisis es necesario». «Lamentablemente no se efectuó el oportuno análisis individualizado de su interés patrimonial, decidiéndose su exclusión definitiva del catálogo de protección, sin justificación aparente«. Y Áncora acusa al Departamento de Urbanismo de actuar con «arbitrariedad».

PROYECTO RAMON CORTAZAR - Áncora lamenta el incendio de Villa Beste Aldekoa y lo achaca a "su abandono"

En referencia al entorno, la asociación patrimonialista destaca la presencia de un caserío del siglo XVII en su proximidad inmediata (Patxillardegi) «que se encuentra en situación semirruinosa pese a estar declarado Bien Cultural»  la situación de los cuarteles, «infraestructura que posee un valor histórico-arquitectónico evidente, reconocido por el propio Departamento de Cultura del Gobierno Vasco y cuya pervivencia se supedita a una gran operación inmobiliaria, que amenaza con arrasarlos en breve».

La historia de la villa

A comienzos del siglo XX Miguel Achaga compró los terrenos del caserío Patxillardegi y encargó al arquitecto Ramón Cortázar la construcción de una gran casa de campo que fue derribada y sustituida en los años 70 por la urbanización Mendigain. La finca de Achaga se situaba en las estribaciones del Alto de Zorroaga, dominando el promontorio que divide Amara de Loyola.

Tal y como cuenta Áncora en este mismo entorno promovió la construcción de otras villas y chalets posteriormente: un total de seis casas diferentes, todas diseñadas por Cortázar. Tres junto a las vías del topo, que llevan el nombre de Eskubikoa, Erdikoa y Ezkerrekoa (Paseo de Errondo 20-22-24) y la que hoy ha sido pasto de las llamas, a la que impusieron el nombre de Beste Aldekoa por situarse en el extremo opuesto de la misma colina, frente a los cuarteles (Camino de la Hípica, 2).

ANO 1920 - Áncora lamenta el incendio de Villa Beste Aldekoa y lo achaca a "su abandono"
Foto de Kutxateka. Beste Aldekoa en 1920.

«La villa Beste Aldekoa, que acaba de ser devorada por las llamas no era en realidad una construcción de nueva planta, sino que surgió como una reforma del antiguo caserío Olaetxe», puntualiza Áncora.

En 1920 Cortázar transformó la modesta edificación rectangular con tejado a dos aguas en una villa neovasca, que se alza sobre un alto zócalo de piedra que le sirve de terraza. «Su planta baja está realizada en sillería caliza y presenta una serie de arcos de medio punto con hermosas dovelas, que evocan la arquitectura tradicional. Consta además de piso principal y bajocubierta con inserción de un mirador sobre el río, rodeado de un  entramado con maderas rectas y curvas, que confieren personalidad distintiva a la propiedad».


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