(EFE). Alcaldes de Álava, de Gipuzkoa y de Navarra han mostrado su rechazo al proyecto del Tren de Alta Velocidad entre Navarra y la conexión con la ‘Y’ ferroviaria vasca y han reclamado que se adecue la actual red ferroviaria para permitir el uso combinado de viajeros y mercancías y la reapertura de estaciones para prestar servicio a la zona rural.
Representantes institucionales de localidades alavesas, navarras y guipuzcoanas que estarían afectadas por la construcción del TAV han entregado este jueves en el Parlamento Vasco y en el Gobierno de Navarra un manifiesto con sus reivindicaciones.
El Ministerio de Transportes aún no ha definido el trazado por el que se conectará por alta velocidad Pamplona con la ‘Y’ vasca y existen dos alternativas, una directa entre Pamplona y Vitoria y otra entre la capital navarra y la estación de Ezkio-Itsaso, en Gipuzkoa.
Un 86 % de los alcaldes de los municipios alaveses afectados por este proyecto y un 88 % de los navarros han firmado el manifiesto.
Si se tiene en cuenta el conjunto de los alcaldes de las comarcas de la Llanada alavesa, de los valles de Iza-Oza y Sakana en Navarra y del Goierri en Gipuzkoa el porcentaje de alcaldes que se han sumado a esta declaración alcanza el 73 %, según ha confirmado la plataforma que ha elaborado la declaración.
Frente a la Cámara vasca representantes institucionales han leído el manifiesto en el que denuncian que las líneas de alta velocidad aumentan los procesos de concentración en las ciudades y favorecen la «despoblación y el aislamiento» de las zonas rurales al dejarlas sin puntos de conexión por ferrocarril.
Han alertado de que se han degradado todos los servicios e infraestructuras ferroviarias en esas zonas lo que imposibilita que trabajadores y estudiantes puedan desplazarse por este medio de transporte a ciudades próximas como Pamplona, San Sebastián, Vitoria y Tolosa.
Además, han añadido, existe preocupación por esta falta de conexiones entre representantes de sectores productivos actuales y de nuevas iniciativas emprendedoras interesadas en implantarse en estas zonas.
También han denunciado que la construcción de la alta velocidad afectaría «gravemente» a la orografía de estas áreas que sufrirían un «gran impacto medioambiental».
Por ello han exigido inversiones en la actual infraestructura ferroviaria lo que permitiría el uso combinado de transporte de viajeros y mercancías y la reapertura de apeaderos y estaciones.
Los impulsores de este manifiesto trasladarán también sus demandas al Gobierno Vasco y la Ministerio de Transportes.
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