Cuando se ha cumplido un año desde que murió Alberto Saavedra varias de sus criaturas protagonizan un homenaje al escultor, que dedicó parte importante de su creatividad para colaborar con la Semana de Cine Fantástico y de Terror de Donostia y plasmar imágenes inolvidables en la fachada del Teatro Principal. Se le extraña a Saavedra, pero sus criaturas fantasmagóricas siguen muy vivas y estos días varias de ellas se dejan ver en el hall del Teatro Victoria Eugenia.
Las dos hermanas de Saavedra, Coro e Inma, han estado hoy en la inauguración de la muestra que coincide con la Semana de Cine Fantástico, con la que Alberto trabajó codo con codo cerca de veinte años.
«Hay muchas obras de Alberto repartidas por museos no sólo de España, también del Extranjero», explicó Coro Saavedra, añadiendo que estas criaturas en particular están guardadas en un taller de Martutene donde trabajaba el artista y de donde aspiran a que puedan salir para ser expuestas. De hecho la familia se halla en conversaciones con las instituciones y algún museo.
Recordaron las hermanas durante la presentación de la muestra que Saavedra «escogía un motivo que podía estar basado en una película o una novela de terror. Un año incluso en un circo de personajes increíbles. Y entonces componía la escena que después se veía en el Teatro Principal».
Unas fachadas, aquellas, que no se olvidan. Que de hecho imprimieron carácter al encuentro y contribuyeron a que la Semana se popularizara mucho más allá de entre los fans del género.
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