Ha pasado un año desde que la Diputación Foral inauguró el centro de recuperación de fauna silvestre de Gipuzkoa, Basabizi. Desde entonces 589 animales han sido atendidos en el centro ubicado en la finca Arizmendi de la Diputación en Urnieta.
En una visita abierta a los medios de comunicación, la diputada general, Eider Mendoza, acompañada por el diputado de Equilibrio Territorial Verde, Xabier Arruti y representantes y técnicos de la dirección de Montes y Medio Natural, ha realizado un balance “muy positivo” del primer año de andadura. “Basabizi nos ha permitido abrir una nueva era en la recuperación de la fauna silvestre. Los números demuestran que la apuesta realizada hace un año ha merecido la pena”, ha subrayado.
De los animales atendidos el primer año el 85% son aves, el 9% mamíferos y el 6% reptiles. Casi el 60% de los animales que han entrado se han curado y han vuelto al medio natural. Otros han sido enviados a santuarios animales de la zona por tratarse de animales que no pueden volver a la naturaleza o por tratarse de especies exóticas como serpientes de pitón, loros, cotorras o gekkos -algunas de estas especies están amenazadas y sufren comercio ilegal-. Otros animales han muerto por lesiones o enfermedades.
La colaboración con otros centros que trabajan como centros de recuperación de fauna silvestre o como santuarios de animales tiene una gran importancia en la actividad de Basabizi. Así lo demuestran distintos casos. Por ejemplo, en la primavera de 2023, una persona que salía de Valladolid con destino a Gipuzkoa recogió un pollo de cernícalo primilla caído del nido, y lo entrego en Basabizi.
Esta especie está protegida, pero no está presente en Gipuzkoa aunque sí en zonas cercanas, de forma que se recuperó en el centro, y se entregó después en el Centro de Recuperación de fauna de Ilundain (Navarra).
Actualmente, el centro está atendiendo a 31 animales entre los que se encuentran tres busardos ratoneros, un milano negro, varios vencejos, un cernícalo, además de un corzo joven. En Basabizi ingresan también ejemplares de fauna silvestre que aparecen muertos, analizando las causas de la muerte y realizando necropsias en los casos en los que es necesario.
Esto permite hacer un seguimiento del estado sanitario de las especies de fauna silvestre de Gipuzkoa. Esta vigilancia sanitaria de la fauna permite detectar la aparición de determinadas enfermedades o cambios en su prevalencia, en colaboración con los centros científicos de referencia. Por otro lado, Basabizi participa en los planes de recuperación de la fauna silvestre y colabora con la red de parketxes de Gipuzkoa para organizar eventos de suelta de aves que despiertan un gran interés.
La Diputación destina 2,59 millones al área de Animales y Plantas Silvestres en los presupuestos de este año.
En caso de encontrarse con un animal herido, la recomendación es abstenerse de tocarlo y dar parte cuanto antes al teléfono 943 000 420 de la emisora de la Dirección de Montes y Medio Natural, para que el servicio de Guarderío lo recoja y lo traslade al centro, con el objetivo de que pueda recuperarse y volver a su medio natural lo antes posible.
La gestión de Basabizi cuenta con un equipo compuesto por cinco personas –un veterinario, tres asistentes clínicos de veterinaria y un operario-, bajo la coordinación y supervisión del Servicio Foral de Fauna y Flora Silvestre. Las instalaciones disponen de 5.000 metros cuadrados que albergan un módulo de recepción que permitirá la entrada de animales las 24 horas los 365 días del año, incluso estando el centro cerrado.
Basabizi dispone también de una jaula especial para aves de la familia de los fringílidos, de amplios espacios donde las aves pueden recuperar las facultades para el vuelo, así como de un depósito para animales acuáticos.
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